¡No me entienden!

¡Qué importante es hablar bien!

El lenguaje verbal nos permite desde la niñez adaptarnos al medio social.

Nos comunicamos con el lenguaje, con el cual expresamos nuestras necesidades, opiniones, pensamientos y sentimientos.

Cuando la forma de hablar de los niños presenta dificultades de entendimiento con el entorno, puede crearles limitaciones para relacionarse con otros niños.

El habla constituye un instrumento de comunicación, si un niño no habla bien no se relacionará bien con los demás.

Cuando nuestros hijos comienzan a estar en contacto con otros niños de su edad, es en muchas ocasiones cuando afloran las dificultades de comunicación.

Los niños utilizan fuera de casa el mismo código que han aprendido y que les sirve perfectamente en su entorno familiar para comunicar lo que quieren.

¨En casa le entendemos pero en el cole no¨, me comentan mucho padres.

Los padres le entienden y van estableciendo unos códigos y una comunicación que a simple vista no requiere de ninguna ayuda.

En ocasiones los niños se comunican con palabras que han inventado desde pequeños, también lo hacen con  gestos o señalan lo que quieren. En casa les funciona pero fuera no.

Es cuando tienen 4 o 5 años que sus propios compañeros les dicen que no los entienden.

Muchos niños comienzan a tomar conciencia de sus dificultades y prefieren no hablar para evitar los malos entendidos y la sensación de vergüenza en el aula.

¿Qué significa no hablar bien?

Los niños van construyendo el lenguaje de forma gradual.

Desde sus primeros balbuceos y juegos vocálicos que van emitiendo, somos los adultos los que vamos interpretando esos sonidos y ayudándolos a ir construyendo el lenguaje.

En este proceso pueden presentarse algunas interferencias en la forma de hablar que hace que la comunicación de los niños con su entorno de iguales no sea clara.

  • No pronuncia bien algunas letras y las palabras cambian.
  • No estructura bien las frases generando un desorden en el mensaje.
  • Utiliza un lenguaje propio con palabras inventadas que en la familia se han hecho conocidas.

  ¿Qué les ocurre a los niños cuando no hablan bien?

  • Generalmente son niños introvertidos fuera del ámbito familiar.
  • Se retraen más cuando notan que los demás no los entienden.
  • Prefieren no hablar para no pasar malos ratos.
  • Generan desconcierto en los profesores.
  • Se apartan del resto de los compañeros. Solo juegan con aquellos que los comprenden.
  • Pasan un mal rato si les insisten en hablar porque no encuentran la manera de hacerlo.
  • Se van aislando y generalmente terminan teniendo dificultades para relacionarse.
  • En las asambleas no se expresan o son ayudados por otros niños para expresarse.
  • Hay niños que no quieren ir al colegio.

¿Qué debemos hacer?

Es importante comenzar cuanto antes con un tratamiento logopédico para que un problema que inicialmente es de articulación o de estructuración del lenguaje no desemboque en un problema de relación del niño con su entorno.

Debemos tener en cuenta que:

  • El lenguaje que deben ir adquiriendo los niños sea universal, todo el entorno los tendrá que entender.
  • Que las palabras que utilizáis en casa no sean inventadas por los niños. Si cuando era más pequeño decía ¨pepo¨ para decir peluche no utilicemos esa palabra y digamos peluche.
  • Que sea una señal para pedir ayuda cuando nuestro hijo nos diga que no sabe hablar bien o que no sabe decir determinadas palabras.

Hablar bien les permite relacionarse e ir adquiriendo confianza para expresar sus necesidades, sus pensamientos y sus emociones con los demás.

Un niño que puede expresarse con naturalidad se siente libre y seguro.