Frases que limitan…

¨A mi no me sale¨. ¨Voy a perder¨. ¨No me va a ir bien¨. ¨No puedo hacerlo¨.

Hay muchos niños que antes de hacer lo que desean se paralizan y dicen este tipo de frases.

Nos transmiten con su lenguaje inseguridad, miedo, falta de iniciativa y falta de confianza.

En muchos casos son niños que prefieren no intentarlo y necesitan la ayuda constante de un adulto para conseguir sus metas.

Comprender que las palabras y las frases ejercen un gran poder, es fundamental para poder ayudarlos a que cambien de actitud.

Muchos niños, por el contrario, se animan con frases alentadoras para conseguir lo que desean, transmitiendo positivismo y un desafío constante con todo lo que se les pone por delante.

¨Lo voy a conseguir¨. ¨A por ello¨. ¨Lo intento otra vez¨. ¨Esto me va a salir¨.

Estas frases son una gran herramienta de motivación para ellos.

Demuestran un pensamiento positivo que sin duda los predispone a esforzarse para lograr lo que se han propuesto.

¿Cómo podemos enseñarles a los niños a que tengan una actitud optimista?

Muchas veces hemos mencionado que los niños nos imitan.

A veces desconcertados queremos descubrir por qué nuestros hijos no tienen una actitud positiva y ellos mismos se van creando impedimentos para conseguir lo que desean.

Es muy probable que tus niños imiten esa actitud.

Obsérvate a ti mismo y descubre cómo actúas tú frente a tus retos o a tus actividades diarias.

¿Qué frases dices? ¿Cómo te predispones para las metas que te propones?

Debemos comprender que las palabras y las frases que nos vamos diciendo cuando realizamos algo son las que nos juegan a favor o en contra para conseguir lo que deseamos.

Reconozcamos que es mucho más beneficioso pensar en positivo y a partir de este punto comencemos el ejercicio.

Tomemos conciencia de las frases que utilizamos a diario y seleccionemos solo las que sean motivadoras para avanzar.

Tener una actitud optimista nos acerca muchísimo a la meta, disfrutando más de cada experiencia.

A veces nos damos cuenta a través de nuestros hijos qué actitudes debemos de cambiar los adultos.

Tener ganas, querer intentarlo, aceptar que no nos ha salido pero seguro que lo conseguiremos, es la mejor enseñanza que les podemos proporcionar a nuestros hijos.

Es muy desolador escuchar decir a los niños, no puedo, yo no lo sé, a mí no me sale.

Estoy segura que si aprendemos a darles las herramientas para que lo intenten y se enfrenten con entusiasmo a sus retos, cambiarán rápidamente de actitud.

  • Sé un ejemplo para tu hijo, utiliza un lenguaje positivo cada día.
  • Toma conciencia de las frases que dices, impleméntalas de forma positiva.
  • Anima a tu hijo. Que sepa que estás a su lado independientemente del resultado.
  • Confía en él y en sus posibilidades.
  • Transmítele la importancia de volver a intentarlo, así aprenderá que merece la pena el esfuerzo.
  • Reconoce sus virtudes y fortalezas para motivarlo. Resalta lo bien que hace las cosas, no esperes a que no pueda lograrlo.
  • Enséñale a buscar ayuda cuando la necesite.
  • Proponle actividades diarias que impliquen esfuerzo y constancia. Hacer deporte, colaborar en las tareas de casa, tener un tiempo de estudio como rutina lo ayudará.
  • Muéstrale tu confianza. Hazle saber que estás orgulloso de cómo está haciendo las cosas.

 

Implementar un lenguaje utilizando palabras, frases y mensajes positivos nos permitirá motivarnos y conseguir las metas que nos proponemos.

Un lenguaje positivo nos impulsa inevitablemente a superarnos, a avanzar y a progresar en todos nuestros aprendizajes, transitando por un camino de éxito y de felicidad.